A nosa fala
Historia reciente
El 3 de agosto de 1992 se fundó la asociación Fala i Cultura, entre cuyos propósitos se encuentra la elaboración de una gramática común (con base gallega), así como la conmemoración de u día da nosa fala («día de nuestro habla») celebrado una vez al año desde 1992 en Eljas, 1993 en Valverde y 1994 en San Martín.
No sería hasta seis años después, en 1998, cuando llegará a publicarse la primera obra literaria en a fala, Seis sainetes valverdeiros, escrita por Isabel López Lajas, y editada en 1998 por Edicións Positivas de Santiago de Compostela. Fue en esa fecha cuando el Gabinete de Iniciativas Transfronterizas comenzó a preocuparse seriamente por a fala y a fomentar su estudio, publicando en 1999 una decena de tratados científicos; y celebrando en el mes de mayo un Congreso sobre «a fala«.
Habrían de transcurrir varios años más hasta que el 14 de junio de 2000, la Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura reconociese el habla del Valle de Jálama como Bien de Interés Cultural, a fin de protegerlo y conservarlo; siendo, en 2001, declarado por la Junta de Extremadura como Bien de Interés Cultural.
No faltó tampoco una polémica donde se mezclaron la política, afanes localistas y fuertes personalidades. La inclinación de la balanza hacia orígenes galeguistas o hacia orígenes lusos levantaba ampollas. Muestra de ellos son los numerosos artículos que se publicaron en prensa desde un lado y el otro, interviniendo el presidente extremeño Ibarra, o el vicepresidente de la Xunta de Galicia, Anxo Quintana. Consulta algunos artículos de la polémica en estos enlaces:
http://www.hoy.es/pg060425/prensa/noticias/Regional/200604/25/HOY-REG-140.html
http://www.galiciaconfidencial.com/imprimir/77.html
http://culturagalega.gal/resultados.php?q=xalima
En la actualidad, si bien los habitantes del Valle de Jálama (Val de Xálima) pueden hablar castellano (siendo ésta la lengua de uso común en los colegios y entornos administrativos), y presumiendo a menudo de hacerlo de forma más «correcta» que sus vecinos cacereños o salmantinos, la gran mayoría son bilingües, dado que en el ámbito casero, así como también en diversas actividades extraescolares, sigue empleándose la lengua local.
Sin embargo, es tal el empuje y auge de la lengua castellana en los últimos años (constatado por la pérdida de numerosos localismos, reemplazados por la versión castellanizada), que algunos filólogos consideran que esta lengua podría evolucionar hasta convertirse en una suerte de dialecto castellano-extremeño plagado de abundantes términos gallegos y/o portugueses.
Surgen asociaciones nuevas que apuestan por la confluencia gramatical y que debaten periódicamente por la regulación, promoción y defensa de la Fala y que parecen dar un nuevo impulso colectivo a esta peculiaridad lingüística.
Como escollo principal se encuentra sin duda el abanico de posibilidades ortográficas y fonéticas que enfrentan (en sano debate) a lingüistas como Xosé Enrique Costas (Univ. de Vigo), Juan María Carrasco (UEX), José Enrique Gargallo (Univ. Barcelona), Clarinda de Azevedo Maia (Univ. de Coimbra), Francisco Fdez. Rei (Univ. Santiago de Compostela), Antonio Salvador (UEX) o jóvenes investigadores como José Antonio Salgado, Tamara Flores, Alicia Manso Flores, Miroslav Vales, etc.